En el mundo moderno ya no se discute el modelo de desarrollo, porque el modelo de desarrollo desde hace algunas décadas es el mismo: capitalismo salvaje. Esa es la verdad, "dejar hacer, dejar pasar" se ha convertido en la premisa fundamental de nuestro mundo. Sobreviven algunos rebeldes como Cuba, Vietnam, Corea del Norte, y un poco la China que en lo político es socialista pero en lo económico es capitalista.
El capitalismo llano y puro impera en nuestra sociedad mundial, ya no se discute si es el Estado el que debe imponer todas las reglas o no, eso es caduco, ahora quien impone todas las reglas es el capital, o mejor dicho, los dueños del capital son los que imponen las reglas. El Estado es un gendarme, un mediador, un árbitro, al mejor estilo de lo expuesto por Adam Smith y John Locke.
Como todos saben, este capitalismo puro o salvaje ha generado varios fenómenos, entre ellos, la acumulación excesiva de riqueza en algunas manos y la crisis financiera que ha agobiado a nuestro mundo en los últimos años, sobre todo a Europa y a Estados Unidos.
Dentro de ese capitalismo puro se discute un punto importante: cobrar más tributos o menos. La administración de Barack Obama, por ejemplo, entro pisando duro, y con la consigna de aumentar las obligaciones económicas con el Estado por parte de las clases más pudientes, eso significa cobrar más impuestos. Con las recientes crisis de Irlanda y Grecia, la Unión Europea le ha exigido a estos países aumentar los recaudos y acabar con exenciones: más impuestos.
Como si lo anterior fuera poco, el magnate Warren Buffet aconsejó a su gobierno que debería cobrar más tributos a los más pudientes, pero no cualquier centavo, sino cobrar una suma fuerte a los más ricos para equilibrar la economía y el déficit fiscal que agobia a los Estados Unidos.
Sin embargo, los norteamericanos están cansados, el nuevo fenómeno populista de derecha el "Tea Party" ha puesto el grito en el cielo sobre este aumento de los impuestos por parte de la administración Obama, y al parecer las cosas están funcionando porque la paliza que recibió el Partido Demócrata en la última contienda electoral no fue cualquier cosa.
En Colombia el presidente Santos había prometido en su campaña electoral no aumentar los impuestos, sin embargo, al parecer, una reforma tributaria que no aumentaría tarifas pero sí hechos impositivos estaría a la orden del día. Así mismo en Colombia se discute una reforma al régimen de regalías que se deducen de la explotación petrolera, ya que estos recursos no se estarían gastando tan eficientemente como se debería por parte de los entes territoriales, lo cual ha causado controversia, pero que sería necesario según los expertos para conjurar una verdadera crisis fiscal del sector central hacia futuro.
"No hay tributación sin representación", principio fundamental hacendístico, sin embargo, lo que está ocurriendo es que la tributación sube pero el poder popular baja ¿por qué? Porque las personas están cada vez más desilusionadas con los políticos, hay herramientas de participación, pero la democracia como sistema está cada vez más cuestionado por la corrupción, por el populismo, y por la ineficacia de los gobiernos, aunque, contradictoriamente lo que se necesita para salir de la crisis es una mayor participación popular y unas democracias mucho más fuertes.
Subir impuestos desestimula la economía, eso es un hecho psicológico, la gente no quiere producir más porque sabe que eso que gana se lo tiene que dar al Estado. A contrario sensu, si no hay tributos el Estado se quiebra, y no hay un "servicio público" eficaz lo que redunda en poca seguridad, regular justicia y pésima educación y salud.
Los gobiernos deben encontrar el punto medio en materia tributaria, en muchos países agobiados por la crisis económica se ha escogido cobrar más impuestos para equilibrar el déficit fiscal de sus respectivos Estados, y multimillonarios como Buffet solicitan una carga mayor en materia impositiva para los sectores más pudientes de la economía. No sabemos cuál es el ideal, sin embargo, todo apunta a un futuro donde el "capitalismo filantrópico" no será una tercera vía sino la única vía.
2 comentarios:
Creo que lo malo no es que suban los impuestos, sino que los suban y eso no se vea reflejado. Es como un robo cuando pagas impuestos altos pero la salud que recibes es una mugre.
Por ello, los impuestos no sólo deberían tener representación, sino también retribución.
Juankmu: Perfecto, la eficacia del tributo, un punto muy importante desde luego, saludos.
Publicar un comentario