¿ DEBE CREARSE UNA SUPER-CORTE DE JUSTICIA EN COLOMBIA ?

Aprovechando la actual coyuntura de reformas institucionales en el Congreso de Colombia, y de la propuesta de reforma a la justicia, varios académicos y comentaristas han entrado en el debate de si es necesario crear una Super-corte de justicia en nuestro país.
Alguien podría decir que ya existe, y es la Corte Suprema de Justicia, sin embargo, la Constitución de 1.991 le otorgó competencia a este tribunal para que fuera el máximo órgano de la jurisdicción ordinaria en materias civil, penal y laboral. En este sentido, la Corte Suprema es la más alta instancia en estas materias según el ordenamiento jurídico colombiano.
La Corte Constitucional también lo es pero en la jurisdicción constitucional, el Consejo de Estado en la jurisdicción contencioso administrativa es la máxima instancia.
Pero, ¿ es necesario que exista un alto tribunal que defina de manera definitiva todas las controversias ? ¿ incluyendo las tutelas contra sentencias, el juzgamiento de funcionarios que tienen fuero, o la resolución de conflictos de competencias ?. En Estados Unidos sí existe este organismo, y es la Suprema Corte, que está conformada por nueve jueces elegidos por el presidente con aprobación del Senado, y que tienen un periodo vitalicio. La Suprema Corte de Estados Unidos pone punto final a todas las controversias jurídicas que se dan en el país del Norte, y contra las decisiones de ella no procede nada, por lo menos dentro de Estados Unidos.
En Colombia, nuestro sistema de jurisdicciones por materia, determina que existan varios altos tribunales, pero ninguno de ellos está por encima del otro, por lo menos en teoría.
La creación de una Super-corte de justicia tendría varios beneficios:1) Resolver los problemas derivados de los choques de trenes por las tutelas contra sentencias, 2) Servir de tribunal de apelaciones en el caso del juzgamiento de altos funcionarios del Estado, 3) Poner punto final a las controversias sobre conflictos de competencias, aunque esto ya lo hace el Consejo Superior de la Judicatura, 4) Servir de tribunal de última instancia para cualquier controversia judicial en Colombia. Sin embargo, los puntos en contra de la creación de este altísimo tribunal serían: 1) Iría en contra de la división de jurisdicciones, tradicionalmente establecida en Colombia, 2) La elección de este alto tribunal no estaría exento de críticas, independiente del sistema que se utilice para su conformación, 3) Los otros altos tribunales, ya no serían los supremos en su propia jurisdicción, y se crearía un recurso supra-extraordinario que mantendría en vilo muchos casos que llevan años ante el conocimiento de los jueces, 4) Los otros altos tribunales, pasarían a ser organismos intermedios de esta super-corte, desdibujando el sistema de jurisdicciones y competencias por materia, lo que podría ir en perjuicio del conocimiento por especialidad.
Una Super-corte, empero, pondría fin a tanto conflicto por supuestas violaciones al debido proceso, unificaría las posiciones jurídicas del país, ayudaría a la seguridad jurídica, y le daría fortaleza a la institución de la cosa juzgada. Por otro lado, no sabemos si es conveniente crear más burocracia, acentuar los celos entre las diferentes altas instancias judiciales, y crear un nuevo escenario de combate para quienes critican a la justicia por su politización. Esperemos qué trae la reforma a la justicia que se debate en el Congreso.

1 comentario:

Gaviota dijo...

Considero que la solución no radica en crear una Corte Supremísima, porque el problema que ha generado estos "choques de trenes" ha sido que no se ha regulado debidamente el tema en la Constitución.

La delimitación entre la jurisdicción ordinaria, la contencioso administrativa y la constitucional hoy en día está desdibujada y permite que estos choques se presenten. Adicionalmente, así se creara una Super Corte, ella no estaría exenta, en principio, de ser accionada en tutela, y el problema, en vez de solucionarse, se agravaría.

Por último, hay un problema aún más grave y es que las funciones unificadoras de jurisprudencia de las Altas Cortes, no se está cumpliendo, así existan sentencias de constitucionalidad al respecto. Por ejemplo, en el Consejo de Estado, una Sección sienta una tesis, que es obligatoria, y otra Sección sienta otra tesis contraria, que también es obligatoria. La Corte Suprema de Justicia se dedica en sus sentencias de casación, a demostrar en 20 páginas, por qué la demanda ha sido mal formulada. Cuando sí decide analizar los aspectos de fondo, se cita a sí misma, dice que no se demostraron los yerros, y deja el caso así.

Por su parte, la Corte Constitucional, aunque ha realizado una labor loable en muchos aspectos, siempre va más allá de lo requerido, y abre las puertas a que las otras Cortes también sobrepasen sus límites, y en consecuencia se genera un caos.

La creación de una Super Corte, lo único que generaría es la creación de una tercera, o cuarta instancia, que lejos de generar seguridad jurídica, atentaría contra ella, por las razones atrás mencionadas. La idea es brindarle justicia a los ciudadanos, y no "regularle" el ego a los Magistrados.

Felicitaciones por el ingreso, y saludos.